contador de visitas Inmueble en Calle Compañía nº 15. Málaga (ciudad)
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Inmueble en Calle Compañía nº 15
Málaga (ciudad)

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Foto 1En el nº 15 de la calle Compañía se alza un inmueble restaurado hace muy pocos años, en el que han sido redescubiertas unas importantísimas pinturas murales de gran calidad. Hasta entonces había permanecido, como tantos otros, pintado de un solo color, ofreciendo una imagen que a lo largo del siglo XIX compartió con otros muchos edificios que corrieron la misma suerte. Afortunadamente, hoy podemos contemplarlo, no exactamente como lo vieron sus contemporáneos en el siglo XVIII, pero sí de manera bastante aproximada, puesto que se han conservado buena parte de sus pinturas murales, gracias sobre todo al magnífico trabajo de restauración llevado a cabo, reponiéndose secciones perdidas allí donde ha sido posible.

Debió pertenecer a una familia rica de Málaga, con gustos estéticos clásicos, porque en la elección del diseño apenas caben concesiones a otros estilos, también usados en la pintura mural barroca, como el rococó o los revivals mudéjares, que podemos observar en otros inmuebles de este período. Del mismo modo, la elección del o los alarifes se hizo atendiendo exclusivamente a la calidad, por lo que podemos pensar que en el paramento de calle Compañía debió trabajar uno de los mejores o sencillamente el mejor pintor mural que habría en Málaga por aquella época, a tenor de la alta calidad de lo que nos ha llegado.

Foto 2Su arquitectura se encuadra en la larga serie de edificios que supusieron para Málaga la culminación del lenguaje barroco en la arquitectura civil, lenguaje cuyos primeros balbuceos comenzarían en el siglo XVII, pero que a raíz de la prosperidad económica que caracterizó el XVIII lograrían alcanzar su madurez, gracias a la evolución propia del estilo, pero también a que esta mejoría general hizo posible que se llegasen a realizar los suficientes ensayos y a cometer los suficientes errores, para que ya muy avanzado el siglo se diera con un lenguaje propio que caracterizará buena parte de la imagen de la arquitectura histórica de esta ciudad hasta el presente.

El inmueble solo ofrece un paramento al exterior, constando de bajo y dos pisos más (foto 1). El bajo original, como tantos otros en Málaga, ha sido completamente destruido y transformado, sin que haya quedado nada de su antigua fábrica. Sin embargo, lo dos niveles superiores sí nos han llegado con un alto nivel de conservación. El conjunto a estudiar, además del nº 15, incluye una finca contigua a su derecha, hoy unida a la anterior, y que debió construirse, pensamos, con posterioridad. Se trata de un anexo de la misma altura, mucho más estrecho, con bajo más tres pisos y balcón preñado o panzudo en sus dos alturas superiores. Sabemos de su restauración al mismo tiempo que el inmueble principal, aunque en la actualidad no muestra pinturas murales.

Foto 3La primera planta o principal del nº 15, de más altura que la segunda, presenta, de izquierda a derecha, un vano rectangular de medianas dimensiones, rehundido y tapiado, y a su derecha dos grandes vanos, de idénticas medidas, protegidos por una baranda muy baja que no forma balcón, decorada con dados y motivos en S en su centro, además de unos cierres fraileros de fabricación reciente, de los que desconocemos si se trata de una sustitución tras la restauración o simplemente de un añadido. El tamaño de estos dos vanos indica la importancia visual que se les quiso otorgar (fotos 1 y 2), aunque llama la atención la solución dada, al no incluir un balcón corrido entre ambos, o en todo caso, balcones para cada uno. Puede que se optara por esa solución debido a la estrechez de la calle, prefiriéndose la utilización de balcones sólo en la planta superior. La axialidad, elemento definidor del inmueble barroco tardío, no está aquí del todo conseguida, aunque los dos grandes vanos ejerzan tal poder de focalización que suplan esa falta de centralidad.

La ornamención pictórica de tipo arquitectónica es monocromática, utilizándose el gris llamado panza de burra en distintos tonos. En primer lugar se perfila el dibujo, y a partir de ahí se aplica el color. La gradación de este ayuda a la consecución de la perseguida tridimensionalidad, además de un efecto especial de sombra a bandas, aplicado sobre el entablamento e imposta, y único, hasta ahora, en este tipo de inmuebles, que simula la luz y la sombra producida por el sol de la tarde tamizada por algún elemento cubriente de la calle como los toldos que se utilizaban para rebajar el calor en los tórridos veranos de Málaga, o también para alguna celebración pública, algo bastante común en el barroco.

Foto 4Así pues, el recercado de los vanos se ornamenta con pinturas que reproducen el orden clásico, basado en un entablamento con arquitrabe, friso liso y cornisa, sobre cuyo cimacio se disponen dos bolas sobre plinto en los extremos, y en el centro una pequeña corona con dos hojas de palmera que se cruzan. De la corona parten sendas guirnaldas curvadas hasta las mencionadas bolas. Esta decoración es idéntica en los dos vanos mayores (fotos 2 y 3). El mencionado entablamento es sostenido por columas de capitel entre corintio y compuesto, fuste liso y basa con toros y plinto. El vano menor repite a escala el entablamento y columnas, aunque los restos de la decoración indican una ornamentación más carnosa y elaborada.

Sobre la imposta ornamentada a bandas y en línea con los del piso principal se sitúan los dos vanos del segundo nivel, iguales, pero de menores dimensiones que aquellos. Se cierran con balcones preñados de hierro forjado, también con dados y motivos centrales en S, repitiéndose la decoración pictórica de tipo arquitectónico antes descrita. Por encima de la cornisa quedan escasos restos de pintura, que indican una ornamentación distinta a la de la primera planta (fotos 1 y 2).

La finca de al lado, añadido posterior o reforma de una estructura preexistente, es como hemos mencionado más arriba, de la misma altura que la descrita, pero con tres pisos (foto 4). Todos los niveles, incluido el bajo, tienen menor altura que su vecino, y solo recibieron decoración los dos superiores mediante sendos balcones panzudos, de hierro forjado y sección cuadrada, con los mismos motivos que los ya descritos más arriba, es decir, dados en la mitad de las barandas y motivos en S en la zona central. A ambos lados de estos dos vanos quedan incrustados en el muro unos cuadrantes que quizá sirvieron para algún tipo de cubrición como las características persianas de esparto.



¿Cómo llegar? Es muy fácil. El inmueble se encuentra al lado del Museo Carmen Thyssen, que a su vez está a escasos metros de la Plaza de la Constitución.

Conservación. Museografía. Didáctica. Restaurado hace muy poco tiempo, el descubrimiento de sus pinturas murales ha servido para enriquecer notablemente el patrimonio de inmuebles con paredes pintadas de esta ciudad. Su calidad es excepcional, y debido a la estrechez de la calle pasan bastante desapercibidas al público en general, por lo que debería implementarse algún tipo de señalización que condujese la vista de los paseantes hacia esas magníficas columnas y entablamentos con las que se ornamenta. Desafortunadamente, no ocurre así.

Ubicación. U.T.M.:
30 S
372902.30 m E
4064906.31 m N

Ubicación en googlemaps©:
mapa


Terminado, incorporado a la página y subido a la red el 02/04/2015. nº 159. vecmálaga©

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