La gran cantidad de industrias que se crearon en Málaga a lo largo del siglo XIX y parte del XX influyó decisivamente en el desarrollo urbanístico de la ciudad. Al elevado número de edificios industriales, que ya de por si ocupaban enormes parcelas de terreno, se unieron las crecientes necesidades de habitación de la población trabajadora, constituyendo una de las soluciones, entre los diversos modelos por los que se optaron, la construcción en los alrededores de la propia factoría de viviendas que respondieran a esta necesidad. La calle Don Cristián nació y se desarrolló gracias a las industrias que allí se instalaron como las Bodegas Scholtz o Pérez Texeira. Además de estas, se levantaron almacenes, talleres y viviendas para empleados.
Hasta hace dos años aún era posible contemplar edificios de almacenes a ambos lados de la calle, uno de ellos adosado a la derecha de la última línea de inmuebles que quedan, al que le correspondería el nº 37 (foto 3), datable hacia las primeras décadas del siglo XX y de indudable calidad estética. De planta baja más una, poseía sencillos arcos escarzanos en todos los vanos, pilastras en las esquinas, retranqueamiento de muros, puerta recercada y tejado a dos aguas con voladizos de madera como los vistos en la Colonia de San Eugenio. Los edificios situados enfrente, también recientemente destruidos, eran similares, aunque más sencillos y posiblemente estuvieran dedicados a almacenes.
En cuanto a lo poco que permanece en pie hasta estas fechas, tenemos una serie de ocho viviendas adosadas (los números 21 al 33 del callejero), de un solo nivel y agrupadas de dos en dos, además de un taller (foto 1). Aunque la datación sea un problema, la carga neoclásica del conjunto, con elementos claramente clasicistas de remarcada austeridad, provenientes de la tradición, como la fuerte axialidad, las pilastras perimetrales, la amplitud de la cornisa, el pretil como remate, las placas rectangulares, etc. invitan a ubicarlos muy a finales del siglo XIX o en la primera década del XX (foto 2). Teniendo en cuenta que en esta calle hubo actividad fabril a partir de las fechas indicadas, así como también la calidad de la construcción, con una fachada de gran presencia y riqueza en elementos decorativos, nos hace pensar que pudieron estar destinadas para dormitorio de personal especializado de esas factorías (foto 2), lo que en aquel tiempo no era nada extraño a tenor de las experiencias urbanas que se llevaron a cabo en otros barrios industriales de la ciudad.
Las fachadas de las viviendas, como hemos mencionado, agrupadas de dos en dos, se distribuyen bajo una rígida axialidad, con un ritmo A-B:B-A, ofreciendo al exterior la puerta y un vano, ambos escarzanos. Los mencionados vanos se rodean de un grueso recercado plano en todo su perímetro. Sobre este se dispone una placa rectangular de obra. Las puertas de las viviendas contigüas, una junto a la otra, poseen el mismo sobredintel recto, que refuerzan la sensación de unidad, sobresaliendo esta parte del paramento sobre el de los vanos, que se encuentra ligeramente retranqueado. Este conjunto se acota mediante pilastras y se cierra en su parte superior con un pretil de obra, aproximadamente 1/3 del muro inferior, separándose del bajo mediante una ancha cornisa moldurada que enmarca aún más el conjunto (foto 2).
En cuanto al último inmueble que queda en el nº 35, considerado un posible taller, usa similares componentes decorativos que las viviendas descritas, con pilastras laterales y pretil sobre ancha cornisa, aunque en este caso con una gran puerta con arco y dintel en la línea de imposta (foto 1).
Acceso.
Es muy fácil. Se sitúan en la zona oeste de la ciudad, cerca de la avenida de Andalucía. Puedes entrar desde la plaza donde se encuentra El Corte Inglés a la calle Armengual de la Mota y la primera calle a la izquierda es Don Cristián. Las casas están más o menos hacia la mediación. Se localizan pronto porque son las únicas antiguas y de una planta que quedan.
Conservación.
Museografía. Didáctica. De toda la industria y residencias adyacentes que hubo en este sector de la ciudad tan solo nos ha llegado esta línea de casas y otro edificio que pudiera haber sido un taller. Hace escasos dos años quedaba otro edificio adosado a este, y enfrente otros tres de planta baja más uno. Estos últimos han sido destruidos, construyéndose en su solar nuevos edificios de viviendas, y no mereciendo por parte de los responsables ni de la sociedad malagueña en su conjunto el respeto de su conservación. Así que solo nos resta esta isleta de magníficas construcciones que deben ser restauradas. Son parte de nuestra historia, migajas del patrimonio inmueble que no pueden seguir abandonadas esperando la piqueta. La belleza de sus formas y la historia que cuentan de nosotros mismos las hacen parte necesaria del patrimonio arquitectónico de Málaga.
Ubicación.
U.T.M.: 30 S
372243.63 m E
4064737.64 m N