La
Ermita de la Fuensanta de Pizarra aparece en todos los
manuales que hemos consultado hasta ahora, y que más abajo se relacionan
en el apartado "Bibliografía consultada", como construcción
mozárabe del siglo X, aunque por su aspecto actual sea el "menos
mozárabe" de los recintos a los que en la provincia malagueña
se les asigna tal calificativo (foto 1).
Sabemos que en
el siglo X ya existía una iglesia semiexcavada en la roca (foto
2), que la actual nave que la forma se construyó en
el siglo XVI, y que fue restaurada a comienzos del siglo XVIII, mientras
que su fachada actual de estilo neogótico (foto 3),
al igual que el retablo interior de mármol, datan de principios del
siglo XX.
A los pies de
la nave y a ambos lados, formando una T con esta, se sitúa la
mencionada fachada neogótica compuesta por dos cuerpos, en cuyo interior
se encuentra una vivienda horadada en la roca (foto 4)
que parece formó parte de la iglesia más antigua,
por lo que es probable su inicial dedicación cenobítica, es
decir, que habitarían en ella una comunidad de religiosos. En la actualidad
siguen ocupándola eremitas. Algunos autores establecen una clara
relación entre la ermita y el poblado mozárabe de Castillejos
de Quintana por su proximidad geográfica y cronológica.
Foto 2 Foto
3 Foto
4
La
parte visible de la nave se divide en tres tramos definidos mediante arcos fajones
(foto 5), cubriéndose el más próximo
a la entrada con bóveda vaída (foto 6) y
los otros dos con bóvedas de arista y rosetones en la clave. Como
dijimos más arriba, el retablo de mármol es de principios
del siglo XX, sustituyendo a otro de madera anterior, y además ocultando
un primer tramo de la nave claramente excavado y cuya cubrición
"camufla" la rusticidad que originalmente pudiera tener la iglesia,
además de esconder su origen (foto 7).
La ermita alberga
la imagen de la Virgen de la Fuensanta, patrona de Pizarra, a más
de otras figuras y pequeños elementos decorativos como cuadros, candelabros,
estípites, lámparas, espejos, en estilo dieciochesco, que
no recargan la nave de objetos, lo que compensa su escasa anchura y permite
una menos "oprimente" contemplación del altar (fotos
5, 6 y 7). Desde el exterior de la ermita existe un camino
que desciende hasta unos grandes arcos que forman un puente, donde en una hornacina lateral se encuentra
una figurita de la Virgen, y por el que antiguamente cruzaba un arroyo,
hoy desecado (foto 8). Es un lugar con un gran
encanto y que no debéis olvidar visitar.
Foto 6 Foto
7 Foto
8
Bibliografía consultada.
En Ruta de las Iglesias y Conventos, ver:
(010):
; y en Ruta Mozárabe, ver:
(001).
Acceso.
El acceso es bastante fácil. El camino que lleva a la ermita comienza
en la calle la Ermita, situada al este. Desde ella se sale del pueblo y
a lo largo de unos 800 metros se extiende el sendero, al principio con suelo
de hormigón y después sin asfaltar pero en buen estado, hasta
la ermita. Este camino pasa cerca de la Necrópolis
Prehistórica de El Hacho ya comentada en otra ficha. El horario
de apertura es: en invierno de 9 a 13 horas y de 15 a 19 horas. Los martes
permanece cerrado.
Conservación.
Museografía. Didáctica. El estado de conservación
de la ermita es envidiable. Tanto la nave como las habitaciones laterales
se encuentran en muy buen estado. En el exterior sucede los mismo. Incluso
hay carteles indicando el hotario de apertura y otro contando brevemente
la historia del lugar. Sólo queda una duda. Si quitásemos
el retablo de mármol de principios del siglo XX ¿qué
nos encontraríamos?. Quizá ese primer tramo de iglesia horadada
en la roca, vestigio de un pasado muy remoto que merecería la pena
recuperar. Habría que pensarlo. De lo que estoy seguro por lo oido
es que esas cuestiones están en la mente de algunos pizarreños.
Ubicación:
30 S
347816.07 m E
4071421.15 m N
Ubicación en googlemaps©:
Terminado, incorporado a la página y subido a la red el: 27/01/2014. nº 87 vec2014©
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