La tradición de pintar las fachadas con distintos motivos: texturales, geométricos, arquitectónicos, figurativos, naturales, narrativos, etc. solos o en convivencia unos con otros fue una característica estética de los edificios de nuestra ciudad durante los siglos XVI, XVII, XVIII y parte del XIX. La belleza y brillantez de estas composiciones mostraban la pujanza de una economía basada en el comercio, haciendo posible la existencia de un gran número de artistas dedicados a estos menesteres. De todo aquello poco nos ha llegado, sobre todo en la orilla oeste del río Guadalmedina, ya que hace unas pocas décadas se procedió al derribo de la mayoría de edificaciones que todavía se mantenían en pie, y cuya recuperación, sin duda alguna, hubiera supuesto el mantenimiento de un patrimonio impresionante y único, además de un poderoso foco de atracción tanto económico como cultural. Pero la realidad no fue así, y en la actualidad, cuando el proceso de destrucción de lo poco que queda aún continúa, solo nos han llegado unos cuantos supervivientes de aquel esplendor.
Foto 2 Foto 3
El inmueble que nos ocupa en calle Calvo (foto 1), muy cerca del ya estudiado en esta web de calle Cerrojo, ha sido recientemente recuperado (foto 2) para el conjunto patrimonial de casas pintadas de la ciudad de Málaga. Fechado en 1755, como reza en el dintel del portón principal (foto 3), es un magnífico ejemplar de edificio barroco malagueño situado en un momento estilístico avanzado dentro de la evolución formal que este tipo de construcciones civiles sufrió a lo largo de los siglos XVII y XVIII.
Exteriormente, la distribución de los vanos es casi axial, a excepción de la planta baja, donde un portón adintelado y resaltado centra la composición, contando con tres vanos rectangulares, dos a la izquierda y uno a la derecha, todos con rejería (foto 1). El muro se decora con motivos texturales de carácter plano, en concreto sillares de punta de diamante, cuyos perfiles se señalan mediante líneas (foto 4), similares a los ya vistos en la iglesia de San Juan o en el inmueble de calle Cerrojo.
La planta superior o principal posee tres vanos que coinciden tanto el central con la puerta principal, como los dos laterales con los dos vanos también laterales a derecha e izquierda del piso inferior. Es decir, que se han dispuesto axialmente, siendo los huecos de mayor tamaño del edificio. Estas características, además de la centralidad de la puerta principal y el tipo de decoración utilizada en la planta baja, hacen posible datarlo con claridad hacia la mitad del siglo XVIII, en un momento de casi total madurez de la casa civil malagueña. Los vanos de la planta superior son, como hemos mencionado, de menor tamaño y se ubican justo encima del principal. El edificio se remata en su esquina izquierda con la típica torre de un piso.
La decoración pictórica que se utiliza en los dos pisos superiores y en la torre es de tipo textural con ladrillos pintados a la almagra que simulan cadenas (dispuestos a tizón, excepto las esquinas que lo hacen a soga y tizón), y cajones decorados en su perímetro con una línea gruesa ocre bordeada con motivos de arquitos apuntados en blanco y fondo azul, confiriéndoles un fuerte carácter artificial, como si fuera un paño (foto 5). La utilización de esta técnica en momentos tan avanzados del siglo XVIII, si hacemos caso a la fecha indicada en el dintel de la puerta, nos hace pensar en una solución plástica que ya para la época podría resultar "anticuada", si atendemos a las nuevas experiencias pictóricas que se estaban poniendo en práctica en la ciudad, como la arquitectónica o la orgánica, por nombrar solo dos variantes. De esta última, el propio edificio de calle Calvo ofrece una muestra en el friso que recorre la última planta, decorado con una cenefa que reproduce motivos vegetales de manera esquemática y plana (foto 6).
Foto 6 Foto 7
Acceso. Es muy fácil. La calle Calvo se inicia en calle Hilera (trasera de El Corte Inglés) y es paralela a la calle Cerrojo. Museografía, Conservación, Didáctica.
La fachada, y creemos también las columnas toscanas del patio, han sido recuperadas hace poco tiempo. El lateral izquierdo ofrece una serie de vanos de carácter historicista inexistentes antes de la reforma (fotos 2 y 7). Las pinturas se han reintegrado completamente mostrando un aspecto inmejorable. No existe información de ningún tipo en sus alrededores.